Según Hadley Freeman en El guardiáncuando Ethan Hawke se enteró en una llamada de Los New York Times que el respetado periódico iba a publicar “una gran historia sobre mala conducta sexual en la industria del cine, centrándose en un individuo”, respondió el actor, “Bueno, ¿quién es? harvey weinstein o Kevin Spacey?”. Porque el comportamiento abusivo de ambos era un secreto a voces en el ambiente de Hollywood.
Uno cayó en octubre de 2017, el mismo mes de la vorágine del movimiento Me Too en el que Anthony Rapp acusó al segundo de haberle insinuado en 1986 durante una borrachera, cuando solo tenía catorce años. Posteriormente, otros quince hombres hicieron acusaciones similares y más graves, ocho de los cuales, pertenecientes al equipo de Castillo de naipesMagnífica serie dramática de Beau Willimon (2013-2018) para Netflix en la que Kevin Spacey interpreta a Frank Underwood.
Fue retirado del papel y de la producción ejecutiva y no aparece en la temporada final; Christopher Plummer lo reemplazó como J. Paul Getty en la película. todo el dinero del mundo, de Ridley Scott (2017); y la película biográfica Sangreque había sido fotografiado por Michael Hoffman (2018) para la mencionada plataforma de transmisión con él en el papel del escritor bisexual Gore Vidal (1925-2012), queda bien guardado en algún cajón perdido de la compañía, completo y sin usar.
Netflix oculta ‘Gore’ por algo más que el escándalo de Kevin Spacey
Esa gran película que es Conductor de bebélo mejor de Edgar Wright (2017) según la crítica y en la que Kevin Spacey interpreta a Doc, fue el último que podría lanzarse antes del estallido del escándalo a su alrededor y, por tanto, sin afectar en modo alguno a su distribución y votaciones en los premios cinematográficos. Pero El club de los jóvenes multimillonarios, realizada por James Cox y protagonizada por Ron Levin, recaudó unos dos millones de dólares en la taquilla mundial. Una cerveza.
Hacerlo le había costado quince. Y Sangre, treinta y nueve a Netflix, que no ha podido recuperarse y no hay visos de que vaya a poder hacerlo. Por decisión suya, claro, pero con mucha más sensatez de lo que parece a simple vista. No se trataba sólo de sumarse al rechazo generalizado de el comportamiento del intérpretepero esto había hecho que la película fuera incómoda por los detalles del libreto firmado por Jay Parini y el propio Michael Hoffman.
Detalles imprescindibles porque son básicos en la trama que se narra, los de las maniobras del escritor neoyorquino con los gestos de Kevin Spacey para seduciendo al joven jamie haughton de Douglas Booth durante el verano de 1982 en Italia, tras su fallida candidatura al Senado de EE. UU., tal como lo escribe el primer guionista en su ensayo El imperio del yo: una vida de Gore Vidal (2009). Por supuesto, entre otras cuestiones vitales y políticas que te quiere enseñar.
Una película cuyo comportamiento del actor principal la ha hecho sentir incómoda
zumbido tiene una copia del texto por Jay Parini y Michael Hoffman que se materializó en Sangrey contiene un buen número de escenas en las que el protagonista propone que su objeto de deseo, un aspirante a escritor de visita con su novia, la Mari de Freya Mavor, considere normal algo que sucedió en la antigua Roma: las relaciones sexuales de hombres adultos y poderosos con hombres jóvenes. Lo que en sí mismo es suficiente para entender que Netflix ha optado por ocultarnos la película.
Explora “uno de los temas centrales de la vida de Vidal, la intersección del sexo, el poder y el consentimiento, y al hacerlo, inadvertidamente y se hace eco desconcertantemente de las acusaciones de conducta sexual inapropiada contra Spacey”, dice el periodista Adam B. Vary. Bueno, no podían decirlo porque esta función se terminó semanas antes de que el vergonzoso currículum de Kevin Spacey le explotara en la cara. Los rumores son una cosa y la certeza es otra.
Por otro lado, en un viaje a Roma, el intelectual tienta a Jamie Haughton con dos prostitutas transexuales, Petra y Marcella, “dos bellezas altas, una morena, la otra de ojos azules y rubia, vestidas con vestidos escotados y medias de red. . ”. Los dos bailan sugerentemente junto con el bailarín de Nikolai Kinski, Rudolf Nureyev, y Gore Vidal entrega a su pupilo una lámpara en la que está tallado “una pareja de hombres, un hombre mayor tomando a un joven por detras”.
Ante la excitación involuntaria del otro, el perenne candidato al Premio Nobel le dice: “Eres duro porque eres humano, y en este momento no importa si la hermosa Petra es un niño, una niña o cualquier otra cosa”. No cabe duda de que ni Jay Parini ni Michael Hoffman quieren que nos estremezcamos al escuchar estas palabras de boca de Kevin Spacey, ni que nos pongamos en la piel de otra persona por culpa de su trabajo. Pero es imposible no torcer el gesto bueno, y los de Netflix lo saben.
¿Una segunda oportunidad?
“Entiendo lo que está pasando”, declaró. Michael Stuhlbargque da vida a Howard Austen en Sangrea El reportero de Hollywood en noviembre de 2017, tras la decisión de Netflix de poner la película de Kevin Spacey en el fondo de sus archivos. “Honestamente, todos tenemos alguna esperanza de que tal vez, con el tiempo, habrá una oportunidad para que la gente lo vea en la luz en la que debe ser visto”.
“No sé qué pasará”, continuó. “Cuando trabajas duro en algo, quieres que la gente lo vea. Creo que hay un deseo de que tal vez eso suceda”. Y, por ahora, la polémica ha vuelto a estallar cuando notificaron en 2021 que el actor nacido en Nueva Jersey, y con dos premios Oscar por su Roger “Verbal” Kint de sospechosos de siempre (1996) y el Lester Burnham de belleza americana (2000), Volverá.
En concreto, protagonizada Pedro cinco ochode Michael Zaiko Hall y con Rebecca de Mornay como Brenda, y enfrentándose al detective de El hombre que dibujó Lo dio, dirigida por Franco Nero (2022) y con la veterana Faye Dunaway en la piel de Tasha. La segunda oportunidad para Kevin Spacey de la que hablaba Robin Wright, la Claire Underwood de Castillo de naipes? Y el primer paso para desempolvar Sangre ¿en el futuro? Quién sabe.